Ayer inicié un nuevo curso de FotografÃa de GastronomÃa, fotografÃa de comida, ... ese género de fotografÃa en que te conviertes en tu propio chef, en tu propio estilista, y te obligas a ser creativo, como instructor para los alumnos y como fotógrafo. Es correcto que los peruanos traemos por herencia infinitos recursos para preparar platos exquisitos, y nos gusta comer bien; sin embargo eso, a pesar de ser un plus, no es suficiente para lograr una buena foto culinaria.
La FotografÃa de GastronomÃa se centra básicamente en tener un buen manejo de luz, sombras, colores, texturas, ángulos y composición. Se centra en presentar un plato con un styling adecuado, que sea visualmente espectacular.... no para el comensal, sino para el fotógrafo y para el espectador de la foto. Es por eso que casi siempre, será mejor ser fotógrafo que sabe cocinar, que chef que no sabe de fotos. Una buena fotografÃa de gastronomÃa, debe conseguir que el espectador salive, que se nos "haga agua la boca".
Regresando al curso, en primera clase y luego de la teorÃa, presenté insumos para hacer fotos de "crudos" aplicando algunos trucos para el styling de cada foto.
En este género.... se nos presentarán crudos, a medio cocinar, cocidos, y debemos saber cómo manejar cada caso.
Seguiré contando mi experiencia en una próxima entrada.